Desde hace ya algún tiempo, a medida que avanzo en mi estudio y práctica personal del Karate, no me siento completamente satisfecho con el Shotokan, tal y como se enseña y practica actualmente.
Tenemos un rico legado de katas, pero no profundizamos en ellos. Una vez somos capaces de realizar todos los movimientos de un kata en el orden correcto y con cierto grado de habilidad técnica, ¿ya está el kata aprendido?, ¿ya lo dominamos? Una vez conocemos todos los katas de nuestros estilo, ¿ya lo sabemos todo?, ¿ya está todo hecho? Yo creo que no.
Yo no "me sé" todos los
katas de
Shotokan, ni tampoco los "conozco" todos a nivel práctico, ni mucho menos (sí que sé algo de todos ellos a nivel teórico, aunque ni de lejos todo lo que me gustaría saber). Por supuesto, si se aspira a llegar a dominar completamente un estilo, lógicamente uno de los objetivos debería ser no sólo llegar a conocer sino también ser competente en todos sus
katas. Pero este es un objetivo a largo plazo, y en mis relativamente pocos años de práctica, yo todavía no he tenido tiempo de alcanzarlo. No sólo no me sé los
26 katas de Shotokan, tampoco los 15 fundamentales de Funakoshi. En este momento mi
Karate se compone de 12
katas: los 5
Heian,
Tekki Shodan (mi
tokui kata) y
Nidan,
Bassai Dai,
Kanku Dai,
Jion,
Enpi y
Hangetsu (el último que aprendí). Para llegar a los 15 de Funakoshi todavía me faltan
Tekki Sandan,
Jitte y
Gankaku; y tampoco me sé ni practico el resto hasta llegar a los 26:
Jiin,
Wankan,
Chinte,
Meikyo,
Bassai Sho,
Kanku Sho,
Nijushiho,
Gojushiho Sho,
Gojushiho Dai,
Unsu,
Sochin. Algunos de ellos los he hecho de manera esporádica en algún curso, pero otros nunca los he ejecutado ni una sola vez. Este es el caso de:
Tekki Sandan,
Jitte,
Gankaku,
Jiin,
Wankan,
Chinte,
Meikyo,
Kanku Sho,
Gojushiho Sho y
Unsu.
Cuando tienes cierta experiencia, aprender un nuevo kata (la secuencia de movimientos de un kata) cuesta lo que tardas en hacerlo unas cuantas veces. Podría aprenderme "fácilmente" todos los katas que "me faltan" en un mes, pero eso para mí no tendría demasiado sentido. De hecho hay algunos que "me sé" sólo de haberlos visto muchas veces, aunque yo no los haya ejecutado ni una sola vez en mi vida. Pero si ni siquiera tengo tiempo de entrenar y profundizar lo suficiente en los 12 katas que "realmente me sé" (practico), ¿qué necesidad tengo de aprender más katas a los que no les voy a poder prestar la suficiente atención? A menudo se aprenden katas nuevos únicamente para exámenes de grado o simplemente por romper la rutina y no hacer siempre lo mismo... para inmediatamente después meterlos en "el cajón de los que ya te sabes" y no volver a practicarlos ni prestarles atención mas que de vez en cuando. Algunos incluso se aprenden para acabar siendo olvidados al poco tiempo de haberlos aprendido, pero claro, no es que se olviden, es que nunca llegaron a aprenderse.
Por otro lado, la idea de aprender nuevos movimientos (katas) sin conocer su significado ya no me resulta atractiva. No necesito más katas que no comprendo y no sé utilizar, necesito comprender y poder hacer funcionar los que supuestamente "me sé".
Actualmente es extremadamente fácil "aprender" katas (hay libros, vídeos, internet, etc., etc.). Ahora, muchos los conocen y los hacen, pero muy pocos los comprenden y realmente "se los saben".
¿Cuántos practicantes de Shotokan conocen y entrenan el kata Chinte?, ¿cuántos encuentran sentido a los "saltitos" del final del kata?
¿Cuántos practicantes de Shotokan conocen y entrenan el kata Jiin?, ¿cuántos de ellos saben que a la versión de Shotokan le faltan 4 movimientos?, ¿cuántos están dispuestos a averiguar cuáles son y añadirlos?
Hay demasiados katas, y muy poco tiempo y conocimiento para entrenarlos y estudiarlos con la profundidad que merecen.
El Karate moderno cumple y se ajusta a ciertos objetivos, pero en otros aspectos resulta incompleto. Para aquellos interesados en la historia y tradiciones del Karate, y en practicar con los mismos objetivos que los maestros del pasado, la forma moderna de Shotokan no proporciona un medio adecuado para alcanzarlos.
El objetivo primario del Karate es la efectividad. Para ello, por supuesto se requiere el conocimiento y asimilación práctica de la técnica en sí (kata), pero sólo eso no es suficiente. Sin embargo, es en ese punto donde el Shotokan moderno se queda "atascado", y desgraciadamente "de por vida". Por ello, en ocasiones se oye decir: "El Shotokan tiene los mejores cinturones blancos del mundo... lo que pasa es que nunca dejan de ser cinturones blancos".
Si deseamos practicar el
Karate como el Arte Marcial que nos orgullecemos de decir que es, además de la técnica, también es necesario el conocimiento y asimilación práctica de su aplicación, y construir un cuerpo fuerte y poderoso que permita su utilización con éxito en combate real. Por esta razón, los tres pilares fundamentales del
Karate (verdaderamente)
tradicional o "clásico" de Okinawa no son "
Kihon,
Kata y
Kumite (deportivo)", sino:
Kata (técnica/fundamentos),
Bunkai (
kumite/combate basado en el
kata) y
Hojo Undo (entrenamiento complementario/fortalecimiento).
Si comparamos esto con la forma actual de hacer
Karate, podemos comprobar que ahora sólo contamos con uno de los tres elementos: el
kata, al que tampoco le damos el uso que tenía en el pasado. Es cierto, también se hace "
bunkai" de vez en cuando (y hay una creciente y sana tendencia hacia otorgarle la importancia que merece), pero es un hecho todavía despreciable, ya que el tiempo que se le dedica es ínfimo y la forma de enfocarlo... "defectuosa".
Tambien pasamos mucho tiempo intentando desarrollar "
kime" y "pegar muy fuerte"... Giramos con el talón, utilizamos la cadera, intentamos usar la respiración, el
hikite, hacemos ruido con el
karategi... Pero, ¿cuántas veces al día golpeamos el
makiwara? La respuesta es CERO, al día, a la semana, al mes, y al año. ¿Podemos estar así seguros y confiados de la potencia y efectos de las técnicas que tantas veces repetimos al aire?... No lo creo, no.
El Shotokan, por las circunstancias de su historia y desarrollo, se ha visto reducido a un estilo moderno, atlético y básico, pero encierra un gran potencial, y yo quiero descubrirlo.
El Shotokan posee un rico legado (reflejado en sus katas) que traza sus orígenes hasta maestros de la talla de Matsumura, Azato, Itosu, y Funakoshi. Lamentablemente, el Shotokan moderno entiende poco de esto.
¿Se puede "enriquecer" el Shotokan "añadiéndole lo que le falta" o "recuperar lo que ha perdido"? Yo estoy convencido de ello, y eso es precisamente lo que estoy buscando. El mayor obstáculo que podríamos encontrar seríamos nosotros mismos, si no estamos dispuestos a hacerlo.
<< Muchos habrían podido llegar a la sabiduría si no se hubiesen creído ya suficiente sabios >>
Juan Luis Vives
Afortunadamente hay MUCHO Karate fuera del Shotokan, y podemos dirigirnos a nuestros hermanos (otros estilos) en busca de ayuda, en busca de nuevos (o viejos) métodos, otras ideas... Deberíamos estar dispuestos a ir donde haga falta para aprender y encontrar respuestas a nuestras preguntas (si es que nos las planteamos claro). No tenemos por qué limitarnos a nosotros mismos conformándonos con aprender tan sólo una parte de un todo mucho más grande.
Estoy muy de acuerdo con el lema del Koryu Uchinadi de Patrick McCarthy "Un vínculo con el pasado es tu puente hacia el futuro", y considero por tanto que este futuro pasa por una vuelta a los orígenes, al Karate de Okinawa.
Manteniendo mi firme deseo de seguir mejorando y enriqueciendo mi Karate particular, me inicio con mucha ilusión en la práctica de Uechi-Ryu de la mano de un viejo amigo.
Considero que practicar dos estilos es una excelente manera de conseguir un Karate equilibrado.
Entonces, ¿qué vas a hacer a partir de ahora?, ¿Uechi-Ryu?, ¿Shotokan y también Uechi-Ryu?, ¿Shotokan + Uechi-Ryu?...
Voy a seguir haciendo lo mismo de siempre: intentar hacer KARATE.
Víctor López Bondía