lunes, 31 de enero de 2011

Un amigo deja el Shotokan

Uno de los jóvenes amigos con quien he podido estar en contacto motivado por nuestro mutuo interés por el Karate, ha decidido abandonar el Shotokan. Espero que no haya sido "por mi culpa", debido a mi "mala influencia" como "azote del Shotokan"... jejeje. Ironías aparte, lo que sigue es parte de lo que nuestro amigo exponía ayer en un foro. Voy a reproducir aquí algunos de sus comentarios, y mis reflexiones al respecto, porque considero que puede resultar también útil e interesante para otros aficionados como nosotros:

____________________________________________

"Seiza" escribió:

« Tras cuatro años y medio de práctica dura y constante de Karate Shotokan, y a las puertas del Shodan, abandono.

El motivo de más peso, es que al quedar con gente - desde amigos muy cercanos a simples conocidos - para realizar sparring con protecciones, hago de todo menos lo que entreno. Mis compañeros de entrenamiento son tan variopintos como practicantes de Krav Maga, Wing Chun, Tai Chi Chuan, Judo y "novicios" de envergadura considerable (sobre todo para mí, que mido 171cm y peso 66 Kg).

Cuando el entreno de lo que es un arte marcial pierde su esencia y se transforma en Kihon-Do, no tiene sentido. Cuando escuchas a tu maestro decir que en defensa personal te olvides de lo que estás aprendiendo y uses cosas sencillas o golpes de kick boxing, algo no empieza a cuadrar. ¿Para qué los Age Ukes milimétricos y ataques con Hikite? ¿No sirve de nada a la hora de la verdad todo lo que te dedicas a perfeccionar durante las clases? Lamentablemente si la práctica más cercana al combate es Kumite de competición o, a lo sumo, una vez cada dos meses algo en plan Kyokushin, algo no anda bien (no lo digo en detrimento del Kyoku, sino precisamente porque se hace poco o nada). Cuando los Bunkais que haces parecen más una coreografía de baile, donde no ves técnica alguna, sino ejercicios de coordinación, donde el criterio de lo correcto y lo incorrecto es la estética (aunque bien acompañada de potencia y velocidad) y no la efectividad, no se está comprendiendo el Kata.

Con el tiempo descubres los enfoques de gente como Iain Abernethy, haces el pedido de sus libros y te los ventilas todos. También descubres por la red a otros practicantes de Karate que llevan con este tipo de inquietudes mucho más tiempo que uno, y que trabajan para revivir el verdadero concepto de Karate Tradicional: aquél que se basa en la defensa personal. Son blogs como el de Juan Beltrán o Víctor López Bondía. Vuelve la esperanza, parece que otro Karate es posible, uno con Bunkais realistas, con ejercicios fundamentales naturales (no el Kihon robótico) y combate "realista" (que no real). Sin embargo, ¿dónde vas a practicar ese Karate? Al parecer, no hay ningún sitio donde se entrene de tal manera... En el mejor de los casos, puedes reunir a tus compañeros de Dojo para practicar de esta manera. El entreno bajo un Sensei se torna ahora totalmente irrelevante, porque precisamente no hay ningún Sensei que enseñe en esta línea, por lo menos en lo que a Shotokan se refiere.

Cuando no hay persona en tu estilo que pueda enseñarte la metodología que deseas y tu confianza no es tan grande como para pretender ser autodidacta sin temor a evolucionar de manera errónea, ¿qué queda? Cuando ves que el Shotokan está tan desvirtuado, que incluso los pretendidos tradicionalistas no se dan cuenta de lo deportivizados que están (y esta es la mayor paradoja del Karate "tradicional" contemporáneo), que sólo queda deporte... es momento de cambio.

El cambio lo hice hace un mes. De momento lo compaginaba, pero definitivamente abandono el Shotokan. No es otro estilo de Karate, porque ya no creo en el Karate, al menos de la forma en que lo he practicado. Tras estudiar incluso el enfoque de defensa personal (esta corriente minoritaria que quiere resucitar el Karate tradicional), no estoy convencido lo suficiente como para practicar otro estilo de Karate que supuestamente siga esta metodología (en el supuesto que hubiera algún gimnasio recóndito...).

...

Soy consciente de que Goju-Ryu, Uechi-Ryu y otros estilos puedan salirse de esta crítica. Sé que sus Kata seguramente son mundos diferentes. Yo hablo desde el Shotokan, o desde el intento de acercarse al enfoque okinawense manteniendo los Katas de Shotokan. »
____________________________________________


Y mis comentarios al respecto son los siguientes:

____________________________________________

Amigo "Seiza",

Como sabes, te entiendo perfectamente, y si el Shotokan, o incluso el Karate en general, ya no te satisface y sientes que no es lo que quieres hacer (o que no puedes hacerlo como te gustaría), y por tanto deseas abandonarlo, tu opción es lógica y coherente, y cuentas con toda mi comprensión y mi apoyo. Como escribí en una de las últimas entradas de mi blog, me merece mucho más respeto una persona que abandona el Karate al no ver sus expectativas cumplidas, que otra que sigue durante años sin reflexión ni expectativa alguna.
El Karate es una posibilidad, como cualquier otra, y no tiene por qué ser tu opción. Sólo porque hayas estado unos años haciendo Shotokan/Karate, eso no significa que tengas que estar ya "condenado" a seguir con ello toda la vida. Cada cual tiene que procurar buscar el método/sistema y la forma de entrenar que le guste y le deje completamente satisfecho, y que le proporcione los medios adecuados para cumplir sus objetivos. No creo que en Karate hayas perdido el tiempo, y seguro que tú tampoco lo crees; pero si ahora ya no te aporta nada, o no lo que tú quieres, o sencillamente sientes que te apetecería más estar haciendo algo distinto, pues no hay problema: a otra cosa. No hay nada malo en dejar algo que ya no te gusta/apetece/satisface/convence, y de hecho, llegado a ese punto, coincido contigo en que "es momento de cambio" y me atrevería a decir que es lo que debes hacer. "Evolucionar o morir"; si crees que ya no evolucionas, o cambias, o ya sabes lo que toca... :-P

Los problemas del Shotokan, o del "Karate" moderno en general, también yo me he esforzado en identificarlos, y los he "denunciado", ya lo sabes. He sido, y soy, muy crítico con esas cosas, y no me sabe mal en absoluto porque creo que es lo que toca, y que con el pensamiento crítico y analítico es como conseguimos llegar a entender lo que estamos haciendo, identificar los problemas, y poder así solucionarlos, lo que sin duda es siempre el objetivo: mejorar. La actitud que tienen muchos de "Mi estilo es lo mejor y punto"/"El Karate es lo mejor y punto" es una postura cerrada y estancada, basada en la ignorancia, que sólo conduce a la desilusión y al desengaño, y que por supuesto no tiene nada que ver con la actitud de aquellos que desarrollaron el Karate.

Esperanza hay, y otro Karate SÍ es posible (yo lo he visto, jeje). Ahora, está claro que por el momento no es tan fácil como ir a cualquier gimnasio 'convencional' y encontrarlo, es decir, que no se encuentra en cualquier sitio donde ponga "Karate" en la puerta.
Yo mismo entreno solo, en mi casa, precisamente por eso: porque no tengo un "dojo" cerca que me ofrezca la posibilidad de hacer exactamente el tipo de Karate que yo quiero y busco. (Uno de mis mejores amigos y compañeros dice que hago "Karate clandestino"... jejeje) No sé si lo que entreno se puede seguir llamando "Shotokan", lo cual no me preocupa lo más mínimo. Yo creo que sí, pero soy consciente de que muchos "Shotokaneros" seguramente pensarían que no, o al menos no lo tendrían muy claro. Por mí perfecto. Yo no pretendo hacer "Shotokan", eso es simplemente el "estilo" en el que empecé "por capricho de la vida", pero por encima de eso, intento hacer KARATE. Entreno para mí mismo, y (afortunadamente) ya no me limita el estilo. Los que quieran seguir aferrados a una "etiqueta" y una supuesta "tradición" que ni siquiera conocen ni entienden, pues allá ellos.

No obstante, veo y creo que estamos ante un proceso de cambio, si bien es cierto que eso requiere su tiempo, además de alguien que lo lleve a cabo.
Estoy convencido de que cada vez más gente va a demandar ese Karate que tú y yo, entre muchos otros, andamos buscando. Porque sencillamente, me parece lo lógico y natural. Al fin y al cabo sólo se trata de mejorar e intentar darle más sentido al Karate que conocemos, y ¿por qué no habríamos de hacerlo? Y más cuando "el cambio" no sólo pasa sino que simplemente consiste en recuperar la verdadera tradición del Karate...
"La prueba del cambio" está en que los practicantes se están empezando a dar cuenta de las cosas, como se puede apreciar en foros, etc., y en que los expertos que propugnan un tipo de Karate más aplicado y funcional (Patrick McCarthy, Harry Cook, Iain Abernethy, Vince Morris, etc.), que no es ni más ni menos que lo que el Karate nunca debería haber dejado de ser, cuentan ya con un gran reconocimiento y aceptación, que cada día es mayor, y están difundiendo ese enfoque por muchos países desde los que se les requiere. Otro ejemplo es que acaba de salir un libro (en inglés), escrito por un instructor japonés (!) de alto grado en Shotokan, Kousaku Yokota, titulado "Mitos del Shotokan - Las Respuestas Prohibidas a los Misterios del Karate Shotokan", en el que se pretende aportar "luz" sometiendo a análisis y crítica todas esas cosas, de las que cada vez más nos damos cuenta, que en Shotokan se dan por sentadas sin que se cuestione si realmente son ciertas/correctas, o no.
Repito que, seguramente será necesario algún tiempo, no se "conquistan imperios" de la noche a la mañana, y las personas somos reacias por naturaleza al cambio y a abandonar nuestra "zona de confort". Pero tampoco demasiado. Creo que "la semilla del cambio" ya está plantada, lo único que hay que hacer es continuar trabajando, y esperar a que germine. Todo tiene su momento y su lugar, y el tiempo lo va poniendo todo en su sitio.

También hay que tener en cuenta que hasta tiempos recientes no era tan fácil darse cuenta de las cosas, porque no había tanta información disponible. La falta de información sumada a la idea de que "lo correcto" es "obedecer al maestro sin rechistar ni cuestionar nada, OSSSS!!!!" no ha contribuido en absoluto. Aquellos que tenían inquietudes, imagino que, o se las tragaban y continuaban, o se marchaban a buscar fuera, porque ciertamente no debía ser fácil encontrar respuestas. Ahora, en cambio, lo tenemos bastante más fácil, porque la información "vuela". Digamos que la teoría más o menos la tenemos (el que se moleste en buscar un poco, la puede encontrar incluso en pijama sin salir de casa), y seguiremos obteniéndola, cada vez más y mejor. "Sólo" falta difundirla y ponerla en práctica, lo cual también se está haciendo, incluso aquí en España. Por ejemplo, el pasado junio tuvimos a Patrick McCarthy en Madrid (curso que fue todo un éxito, aunque a un curso así deberían acudir "TODOS" los karatekas de España, y no sólo los 150 que fuimos, y los otros tantos que se quedaron fuera). Y desde entonces, Koryu Uchinadi España está organizando también pequeños seminarios en Madrid, con mucha frecuencia, para que el que quiera pueda continuar trabajando y formándose en esa línea.
Ahora que sí que tenemos información, ¿por qué deberíamos ignorarla?, ¿es correcto dar la espalda al progreso?, ¿es lógico no querer saber más de lo que sabíamos hace unos años?, ¿qué sentido tiene ignorar o incluso empeñarse en negar las posibilidades de seguir aprendiendo y mejorando?

Lo que pasa es que los profesores tienen que "ponerse las pilas", a no ser que tengan claro que sólo les interesa el Karate deportivo, y en ese caso que se lo dejen también claro a sus alumnos. Los profesores tienen que empezar también a interesarse y aprender estos métodos, para poder incluirlos en su enseñanza, porque de ellos depende el Karate que se hace en los "gimnasios". Aquel que no sabe, difícilmente podrá enseñar, por mucho que quiera. "Me llama mucho la atención" que parece que hay más cinturones marrones que estudian y reflexionan sobre el Karate, que profesores, los cuales en cambio (y generalizando) parece que creen que ya lo saben todo, y ya no se molestan en buscar más. "¿Para qué reciclarse?, ¿para qué seguir buscando? Total, ya llevo muchos años, ya soy un 'Maestro', y para seguir impartiendo 'oi-zuki y mae-geri' hasta que me jubile, me sobra. A estas alturas no me van a venir a enseñar a mí lo que es el Karate, o a decirme qué o cómo tengo que hacer las cosas... la llevan clara". Los que pretendan continuar así, "estupendo"... pronto llegará el día en que cualquier cinturón blanco que se haya molestado en indagar un poco pueda cuestionarles y ponerles en evidencia (y la culpa no será de la 'insolencia' del alumno, que sólo quiere aprender, sino del que no puede enseñar más, y seguramente no esté dispuesto ni a admitirlo). Los profesores tienen una gran responsabilidad con respecto a sus alumnos, y deberían asegurarse (o al menos intentar) estar siempre a la altura de poder enseñar y ayudar a todos sus alumnos, sean cuales sean las características y necesidades de cada uno de ellos, ya que ese es su trabajo. Los profesores son los primeros que deben seguir entrenando y estudiando, sin importar el grado o años de experiencia que lleven a sus espaldas. El que no se responsabiliza de su propia formación, ¿cómo puede pretender responsabilizarse de la de otros? Aquellos que tras muchos años estén ya desilusionados, desencantados, aburridos, estancados... difícilmente podrán guiar ni ser un buen ejemplo para nadie, y flaco favor le hacen a sus alumnos si no les permiten progresar más allá de sus propias limitaciones (las del profesor, claro).


« La "tradición" del Karate tradicional no se encuentra en repetir movimientos exactamente como otros lo han hecho en el pasado, sino en la manera en la que tú mismo te aplicas, hoy, al Karate que practicas. Creo que ya es hora de que todos dejemos de confiar en aquello que otros una vez hicieron, y, con toda debida humildad, admitamos abiertamente que el Karate que nosotros hacemos es 'nuestro' Karate. Por descontado, una vez hacemos eso tenemos que asumir responsabilidad por lo que estamos haciendo. No más excusas como 'Así es como lo hacemos en nuestro estilo' o 'Así es como lo hacemos en nuestra asociación'. Tienes que entender por qué "tú" haces lo que haces, y si no, entonces quizá necesitas entrenar más, y enseñar menos. »

Por otro lado, creo que conviene seguir despejando dudas sobre el Karate en sí.

Actualmente el "Karate" se nos presenta de muchas formas: "arte marcial" (una 'disciplina', 'filosofía', 'forma de vida' de los antiguos guerreros), "defensa personal" (para aprender a defenderse), "deporte" (para la competición), "actividad física" (para mantenerse en forma), "pasatiempos" (para distraerse y disfrutar de una actividad al margen de las obligaciones de la vida diaria), "profesión" (para los profesores), etc., etc. Y parece que todo entra dentro del mismo "pack", que todo eso puede conseguirse a la vez, haciendo lo mismo y con los mismos métodos.

Pues bien, cada cual puede utilizar y hacer del Karate lo que desee, allá él y su séquito. Sin embargo, el Karate se desarrolló originalmente y está pensado para ser un un método COMPLETO para DEFENSA PERSONAL CIVIL. El Karate ES EFECTIVO y TIENE TODO LO NECESARIO... Todo lo necesario para lo que fue diseñado: poder defenderse en un momento dado, uno mismo, a otras personas o a sus pertenencias, utilizando cualquiera de las armas naturales del propio cuerpo, de cualquier manera posible, contra actos habituales de violencia física no provocados.
El Karate no es "militar", no está hecho para la guerra, no está hecho para "luchar", sino para "defenderse en la calle". No hay que empezar a comparar el Karate con los deportes de contacto, porque son cosas distintas, no es lo mismo. El Karate no está hecho para la competición, no está hecho para enfrentarse a otro karateka y ver quién es "mejor", más hábil. Tampoco está hecho para medirse con boxeadores o luchadores profesionales/especializados en cualquier otra disciplina de lucha. En cualquier deporte hay reglas (esa es la definición de "deporte"), en la defensa personal no hay reglas. No estoy hablando de que lo uno sea ni "mejor" ni "peor" que lo otro, sencillamente son cosas distintas. Que no se mezclen los conceptos. Para el que quiera hacer un método de defensa personal, que además le ayude a estar fuerte y sano, el Karate debería representar una muy buena opción. Ahora, el que quiera ser capaz de vencer a un boxeador o a un luchador de MMA (Artes Maciales Mixtas), por ejemplo, seguramente preferiría y debería practicar boxeo o MMA.

« Para exponer lo obvio, un arte marcial va de pelear. Gyakuzuki es una sola técnica que puede utilizarse en una pelea, como cualquier otro golpe de puño. No puedes desarrollar valores marciales reales a través de eventos deportivos, no importa cuánta sinceridad puedas tener. [...] Los boxeadores profesionales tienen una intensidad que le falta a muchos karatekas... eso se entiende, pero el boxeo no es un arte marcial... es un deporte de combate como el combate de competición... [...] En los deportes de combate se trata fundamentalmente de aprender a combatir contra alguien que hace el mismo tipo/abanico de técnicas que tú en un entorno igualado con reglas... la pelea ignora todas esas consideraciones. En realidad puedes crear un enfoque útil de arte marcial practicando todas aquellas cosas prohibidas en el combate competitivo. El combate de puntos tiene demasiadas reglas, y nunca tiene en cuenta que un oponente no jugará según tus reglas... cosas como sacar un cuchillo, etc., etc... Higaonna Sensei lo expresó bien... si tiene reglas, es combate... la pelea no tiene reglas. Por ejemplo si te enfrentas a más de un oponente coge una silla o cualquier otra arma... haz eso en un combate y a ver qué pasa... se considera injusto, o inaceptable, etc., etc. Yo hice eso una vez en una clase de "pelea" cuando me enfrenté con más de un oponente... fui censurado porque me salí de las reglas... no eran mis reglas, y en una pelea lo único que importa es salir con las mínimas lesiones. El ippon-kumite nos permite practicar en un sentido limitado el tipo de técnicas prohibidas en torneos de Karate... ataques a los ojos, ingle, rodillas, inmovilización de articulaciones, etc., etc. Por supuesto hay posibilidad de lesión en el combate de puntos, y hasta ese punto tiene algún valor, pero también hay posibilidad de lesión al levantar pesas, pero eso tampoco es un arte marcial. »
Harry Cook

El Karate era y es un sistema COMPLETO y EFECTIVO de DEFENSA PERSONAL. Si en algún momento deja de serlo, deberíamos preguntarnos si lo que tenemos delante sigue siendo "Karate"...

Tras siglos de evolución y desarrollo, el Karate se aseguró de tener todo lo necesario para poder cumplir su objetivo con eficacia: Técnicas (Kata), Aplicación práctica de las técnicas con compañero (Bunkai); y Capacidad física para poder aplicar las técnicas (Hojo Undo). ¿Qué otra cosa hace falta?... A mí no se me ocurre nada. Lo que hace falta es que no se pierda nada de eso, y en gran parte del "Karate" moderno, como es el caso del Shotokan, se ha perdido el Bunkai y el Hojo Undo. El Karate tradicional no está basado en "Kihon, Kata y Kumite", como muchos creen; está basado en "Kata, Bunkai y Hojo Undo". En Okinawa los 3 estilos principales son Shorin-Ryu, Goju-Ryu y Uechi-Ryu; y todos ellos basan su práctica en "Kata, Bunkai y Hojo Undo". ¿Por qué? Pues porque, aunque sean superficialmente diferentes, tienen los mismos objetivos, los objetivos comunes y globales del Karate, y esencialmente son todos lo mismo (Karate), se basan en lo mismo, y hacen uso de las mismas herramientas. El problema no está en el Karate. El problema está en el enfoque, en que no siempre se está transmitiendo (a veces ni se conocen) todos sus componentes. El problema está en que la mayor parte del Karate actual es "un trípode al que le faltan dos patas"... normal que no se sostenga. Está todo inventado, y el Karate tiene todo lo que necesita. Ahora, hace falta conocerlo y ponerlo en práctica.

El Karate es "como una pistola": Puede ser brutalmente efectivo... si se sabe utilizar. Pero si no sabes cargar y disparar la pistola, seguramente como mucho podrás utilizarla para golpear a alguien en la cabeza, lo cual puede ser efectivo en un momento dado, pero ni de lejos le estarás sacando el máximo partido al arma. No se está aprovechando toda su capacidad al no estar utilizándola de la forma en la que fue diseñada para ser utilizada. Si sabes utilizar la pistola, puedes elegir entre utilizarla o no; si no la sabes utilizar, en el momento de necesidad hay una alta probabilidad de que no te sirva de nada (así que más vale que no confíes en ella).

Un error frecuente es pensar que el Karate es incompleto porque "el Karate sólo son golpes y patadas"... En la defensa personal VALE TODO, y por tanto, en el Karate, también: golpes, desequilibrios, proyecciones, derribos, inmovilizaciones, luxaciones, estrangulaciones, agarres, empujones, pisotones... hay hasta cabezazos, y están en los katas!! ¿Qué más se puede pedir???? Lo que hay que hacer es conseguir reconocer y admitir que contamos con todo eso, conocerlo, y practicarlo.

« Tenemos el Karate, tenemos todo lo que necesitamos, no necesitamos ir a buscar a ningún otro sitio, sólo profundizar en los katas. »

Todos los estilos tienen el potencial de ser un Karate completo y efectivo. Ahora, hay que estar abiertos y dispuestos a enfocarlos de esa manera. Y si hay que introducir algún cambio y/o mejora, pues no debería haber ningún problema, no es ni más ni menos que lo que en su día hicieron los pioneros/fundadores.

Creo que no voy a extenderme más. Como sabéis, para más información sobre todos estos temas contáis con numerosas lecturas y diferentes secciones en mi web, además de otras entradas en este mismo blog.

____________________________________________

Víctor López Bondía